Les dejamos una nota del diario Tiempo Argentino, escrita por María Victoria Dentice que nos informan las nuevas maneras de conseguir financiamiento en proyectos que queremos llevar a cabo.
EL BOOM DEL CROWFONDING, UNA MODALIDAD PARA FINANCIAR IDEAS Y PROYECTOS:
ARTISTAS Y EMPRENDEDORES UTILIZAN PÁGINAS PARA CONSEGUIR EL APOYO DE INVERSORES PARTICULARES, QUE RECIBEN UNA RECOMPENSA CUANDO LA OBRA SE VE CONCRETADA. DESDE PROYECTOS EDITORIALES Y MÚSICA, HASTA EMPRENDIMIENTOS SOCIALES.
Una vaquita colectiva en la web
Internet sigue siendo un terreno fértil para emprendedores con espíritus inquietos que buscan difundir sus ideas pero que, muchas veces, no tienen el capital para volver sus sueños reales. Páginas como idea.me o libros.com se volvieron herramientas indispensables de "crowfonding". Este término muy acunado por muchos, desconocido por la mayoría, significa financiamiento colectivo y consiste en lo que tradicionalmente en Argentina se conoce como “una vaquita” entre muchas personas a través de páginas de internet, para conseguir dinero que permita financiar proyectos personales o de toda una compañía. Lo usan desde artistas que recién empiezan hasta los políticos. Entre las páginas pioneras, las más conocidas son idea.me y libros.com, la primera, para todo tipo de proyectos, la segunda sólo para proyectos literarios.
Tiempo Argentino dialogó con Miguel Garcia, uno de los encargados del crowfonding de la página española libros.com. García cuenta que mediante su plataforma (http://libros.com/crowdfunding/), la página ofrece a los escritores enviar sus manuscritos y financiar su obra a través del pequeño aporte que hagan los usuarios. "Al estar en Internet, la herramienta pasa a tener uso global y es de utilidad para escritores de todas partes del mundo y hasta la barrera idiomática que podría ser un problema, se verá suplida en pocos días cuando lancemos la versión internacional de la plataforma. En poco más de un año llevamos 13 títulos publicados, 6 títulos financiándose y esperamos llegar al verano con más de 20 libros publicados", explica.
En Latinoamérica, existe el sitio Idea.me donde hay todo tipo de proyectos que buscan financiamiento, separados por distintas categorías desde artes visuales, moda, tecnología, impacto social, y separado por países, algo que resulta útil porque según el país será la moneda en que se calcula el financiamiento que necesita la obra.
Un caso concreto exitoso sirve para terminar de entender el fenómeno: el proyecto “La gran tentación” de Elisa, una artista argentina autodidacta que necesitaba $ 13.800 para financiarse, lo ingresó a la web junto con un video de 2 minutos en el que explicaba a los otros usuarios sus expectativas al respecto, la importancia que tenía para ella sacarlo adelante. Elisa eligió utilizar la recaudación todo o nada, es decir, si en un plazo determinado, no lograba reunir la cantidad total de dinero necesaria, entonces no recibía nada de los aportes que los otros usuarios hayan hecho. Recaudó $ 16.960 pesos en un tiempo récord.
¿Pero por qué otros invertirían en una obra ajena? El gancho está en el sistema de recompensas, que actúa como aliciente. En este caso, quienes donan a la artista $ 30 reciben una mención al lado de la obra cuando esta se exponga, los que aporten $ 50 reciben un skin adhesivo para su celular de de diseños de la autora. Los que aporten $150 reciben a cambio un collage sobre papel. Los que aporten $ 2.000 ganan un mural que la autora pintará en algún ambiente de la casa del inversor. Pablo, que tiene un proyecto editorial sobre música ya alcanzó su objetivo. Precisaba $ 50 mil y logró recaudar $ 53 mil. Esto es sólo la punta del iceberg. Más páginas y más personas se sumarán a la movida en los próximos meses, en poco tiempo la cantidad de proyectos comenzó a inundar este tipo de páginas y sólo eso demuestra que si el sector privado no elige apostar por artistas inéditos, por un bajo costo, el pequeño inversor sí lo hace. «
UNA VAQUITA COLECTIVA EN LA WEB.
ARTISTAS Y EMPRENDEDORES UTILIZAN PÁGINAS PARA CONSEGUIR EL APOYO DE INVERSORES PARTICULARES, QUE RECIBEN UNA RECOMPENSA CUANDO LA OBRA SE VE CONCRETADA. DESDE PROYECTOS EDITORIALES Y MÚSICA, HASTA EMPRENDIMIENTOS SOCIALES.
Una vaquita colectiva en la web
Internet sigue siendo un terreno fértil para emprendedores con espíritus inquietos que buscan difundir sus ideas pero que, muchas veces, no tienen el capital para volver sus sueños reales. Páginas como idea.me o libros.com se volvieron herramientas indispensables de "crowfonding". Este término muy acunado por muchos, desconocido por la mayoría, significa financiamiento colectivo y consiste en lo que tradicionalmente en Argentina se conoce como “una vaquita” entre muchas personas a través de páginas de internet, para conseguir dinero que permita financiar proyectos personales o de toda una compañía. Lo usan desde artistas que recién empiezan hasta los políticos. Entre las páginas pioneras, las más conocidas son idea.me y libros.com, la primera, para todo tipo de proyectos, la segunda sólo para proyectos literarios.
Tiempo Argentino dialogó con Miguel Garcia, uno de los encargados del crowfonding de la página española libros.com. García cuenta que mediante su plataforma (http://libros.com/crowdfunding/), la página ofrece a los escritores enviar sus manuscritos y financiar su obra a través del pequeño aporte que hagan los usuarios. "Al estar en Internet, la herramienta pasa a tener uso global y es de utilidad para escritores de todas partes del mundo y hasta la barrera idiomática que podría ser un problema, se verá suplida en pocos días cuando lancemos la versión internacional de la plataforma. En poco más de un año llevamos 13 títulos publicados, 6 títulos financiándose y esperamos llegar al verano con más de 20 libros publicados", explica.
En Latinoamérica, existe el sitio Idea.me donde hay todo tipo de proyectos que buscan financiamiento, separados por distintas categorías desde artes visuales, moda, tecnología, impacto social, y separado por países, algo que resulta útil porque según el país será la moneda en que se calcula el financiamiento que necesita la obra.
Un caso concreto exitoso sirve para terminar de entender el fenómeno: el proyecto “La gran tentación” de Elisa, una artista argentina autodidacta que necesitaba $ 13.800 para financiarse, lo ingresó a la web junto con un video de 2 minutos en el que explicaba a los otros usuarios sus expectativas al respecto, la importancia que tenía para ella sacarlo adelante. Elisa eligió utilizar la recaudación todo o nada, es decir, si en un plazo determinado, no lograba reunir la cantidad total de dinero necesaria, entonces no recibía nada de los aportes que los otros usuarios hayan hecho. Recaudó $ 16.960 pesos en un tiempo récord.
¿Pero por qué otros invertirían en una obra ajena? El gancho está en el sistema de recompensas, que actúa como aliciente. En este caso, quienes donan a la artista $ 30 reciben una mención al lado de la obra cuando esta se exponga, los que aporten $ 50 reciben un skin adhesivo para su celular de de diseños de la autora. Los que aporten $150 reciben a cambio un collage sobre papel. Los que aporten $ 2.000 ganan un mural que la autora pintará en algún ambiente de la casa del inversor. Pablo, que tiene un proyecto editorial sobre música ya alcanzó su objetivo. Precisaba $ 50 mil y logró recaudar $ 53 mil. Esto es sólo la punta del iceberg. Más páginas y más personas se sumarán a la movida en los próximos meses, en poco tiempo la cantidad de proyectos comenzó a inundar este tipo de páginas y sólo eso demuestra que si el sector privado no elige apostar por artistas inéditos, por un bajo costo, el pequeño inversor sí lo hace. «
Para ver la nota en su espacio original: NOTA.
Nota recomendada por: Rocío Muñoz
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